3 de octubre de 2011

Correísmo: Pan, techo y empleo.

Artículo escrito por Gabriela Padilla, autora del blog ¿Se nos fue el país de las manos?

Llegó nuestro presidente al poder con el guión del Socialismo del Siglo XXI: Ser elegido por el pueblo para luego manipular la Constitución y las leyes; constituyendo  a este en un gobierno no democrático, que criminaliza la oposición y la protesta social, que le quita soberanía al pueblo al perseguirlo e intimidarlo y para prueba de ello tenemos la persecución implementada contra personas como:

La periodista Jeanette Hinostroza, el dirigente de la CONAIE José Acacho, la familia del dirigente estudiantil Marcelo Rivera, Francisco Endara acusado el 15 de agosto del 20011 como "autor por omisión" en el caso EcuadorTV según el fiscal Gustavo Benítez, Pablo Chambers, coordinador de la veeduría que revisó los contratos del Estado con empresas vinculadas a Fabricio Correa, Coronel César Carrión, la asambleista Lourdes Tibán,  María Graciela Crespo, catedrática de la Universidad de los Hemisferios, y procesada por la acusación de terrorismo y sabotaje, acusada de haber entrado violentamente a las instalaciones de EcuadorTV,  la Abogada Ma. Josefa Coronel . Los escritores del libro del Gran hermano. Emilio Palacio. Diario El Universo. La prensa toda.

Son tantos. Y eso que nos son todos. ¿Cómo fue que llegamos hasta aquí?

Claramente el correismo fue la respuesta 2006 al dilema entre 1. la corrupta partidocracia y 2. la falta de líderes jóvenes en la política nacional.

¿Saben? Es muy triste ver como se trata de reciclar el PRE, como quieren seguir tirando piedra los del MPD, de como con nuestros impuestos persigue grafiteros el PSC – Madera de Guerrero, en fin, hijos del mismo LFC son – y ni digamos volver a ver a Osvaldo Hurtado, Lucio Gutiérrez, Álvaro Noboa, y otros personajes que no porque lo intenten pueden igualar el liderazgo y carisma de una ideología que vino para quedarse.

Pero. Un momento. ¿Y cómo nos quitamos de encima el proyecto correista? Pues la vacuna siempre está en la enfermedad. 

Observemos que el correismo padece de un mal: Es una estructura vertical, donde solo una persona dicta lo que puede o no puede hacerse.

Es entonces donde, para combatir el silencio de las filas, los nuevos partidos políticos, deben estar abiertos a la búsqueda filosófica de la realidad nacional. Preguntarse y responderse unos a otros sobre nuestra verdad, mientras se sale de detrás de los escritorios y se palpa la pobreza, la abundancia, la cultura, la ignorancia, el trabajo y la falta de empleo en nuestro país.

Cosa necesaria. Conocer.

También es necesario un gran diálogo nacional pensado desde el individuo para compartir con la comunidad.

Diversidad.

Enriquecer nuestros diversos puntos de vistas a través del diálogo. Es el diálogo lo que hará que se acabe de una vez por todas el venderse en silencio por un bono o un chivito más.

El correismo, se soporta en la polémica y la división de los otros. Deben entonces los futuros partidos políticos buscar armonía y unión en el trabajo de equipo, en el emprendimiento.

Las verdaderas revoluciones se dan cuando se cambian modelos y paradigmas.

Y aunque mucho se cacaree que la revolución está en marcha, Alexis Mera podrá en detalles decirles que es falso y que él todo esto ya lo vivió a punta de pan, techo y empleo.

¿Cambiar el modelo impuesto? ¿Hacer revolución?
Esa es la pregunta 2013 para la naciente década política.

¿Seguimos con la represión o cambiamos el modelo?